Sujetos a confusión por sus nombres parecidos, estos deportes comparten pocas similitudes. De origen inglés ambos (el croquet nació a mediados del siglo de XIX, mientras que el cricket data del siglo XVI), los dos deportes son jugados al aire libre y sobre césped. Sin embargo, las coincidencias ahí terminan, ya que las reglas, intensidad, y objetivos de los dos juegos, son totalmente distintos.

Mientras que el croquet es una actividad más bien recreativa -aunque existe la versión competitiva-, el cricket es uno de los deportes con más seguidores en el mundo, y además de haber sido por mucho tiempo el deporte nacional de Inglaterra, es practicado por millones de personas en los países que alguna vez fueron colonia inglesa.

Las reglas del croquet son sencillas: Su principal objetivo es pasar, mediante el uso de un bastón o mazo, una bola de plástico a través de pequeños arcos distribuidos en el área de juego, para conseguir un total de 26 o 14 puntos, dependiendo de la versión.

Por su parte, la intensidad en el cricket es muy diferente,  y sus reglas son más complejas. Este deporte, jugado en un amplio campo semiovalado de hasta 150 metros de diámetro, es ligeramente parecido al beisbol, y sus partidos son disputados por dos equipos de once elementos cada uno. El equipo que defiende tiene a sus once jugadores repartidos en el campo, mientras que la escuadra que ataca lo hace solamente con una pareja de “bateadores”. El objetivo del juego es anotar más carreras que el equipo contrario, hasta conseguir su rendición.

Twitter @luismiguelgp