Por Luis Miguel Guerrero
Conocidos en la actualidad como “las cebras” por los aficionados, los árbitros de Fútbol Americano no siempre vistieron el uniforme a rayas negras y blancas.
En los inicios de este deporte, los oficiales vestían totalmente en blanco y usaban moño. Sin embargo, los problemas comenzaron cuando algunos equipos vestían también de blanco.
El árbitro de Básquetbol y Fútbol Americano, Lloyd Olds (1892-1982), ideó una solución. Olds, quien arbitraba partidos en la Universidad de Eastern Michigan a finales de la década de 1910, se quejaba porque durante los partidos los jugadores le pasaban el balón por error.
“El árbitro a menudo era confundido con los jugadores”, dijo Olds, “así que los muchachos seguido me arrojaban la pelota o me la rebotaban en la cabeza”.
Con la ayuda de un amigo, diseñó una camisa que lo distinguiría del resto de los hombres en el campo.
“Tuve la tarea de confeccionar una camisa especial para mí”, platicaba Olds. La camisa tenía rayas anchas en blanco y negro, combinación que no era usada por ningún equipo.
Soportando las burlas, Lloyd defendió su idea: “Recibí todo tipo de comentarios cuando aparecí usándola por primera vez, pero la idea se impuso entre los oficiales de Baloncesto y Fútbol”.
El diseño de Olds fue adaptado poco a poco por otros deportes y ligas, y hoy en día, la camiseta a rayas negras y blancas es sinónimo de autoridad en la cancha a nivel mundial.