1.- Lo mejor para el León fue el triunfo. Sin embargo, el trámite del encuentro para los Verdes fue complicado, y es que su actuación no fue la mejor. Los locales perdieron balones al por mayor, se mostraron imprecisos tanto al frente como a la hora de defender, y se dieron el lujo de perdonar un par de claras oportunidades frente al arco de Vermeer. A pesar de todo lo anterior, a los leoneses les alcanzó para conseguir una victoria que les da cierta tranquilidad para la vuelta, la próxima semana en Los Ángeles.

2.- Pensar que un “viejo lobo” como Bob Bradley no iba a estudiar la forma de hacerle daño a la escuadra leonesa, era imposible. El técnico angelino sabía que la presión alta daña el accionar de los Verdes, y en varios lapsos del partido su escuadra se aplicó en esa tarea. Los californianos, aún duros por su pretemporada, suplieron sus limitaciones con potencia y buena condición física, mismas que se fueron consumiendo conforme avanzó el partido, pero que sirvieron para complicarle por momentos la existencia a los locales.

3.- Quedó claro que Carlos Vela es lo mejor que tiene la escuadra angelina. El quintanarroense marcó diferencia en el ataque visitante al arranque del encuentro, pero se fue diluyendo con el paso de los minutos. El resto del equipo -con el respeto que me merece-, aunque de buena presencia física y con disciplina táctica, dista mucho de ser “la gran maravilla” que tanto cacarearon varios medios previo al encuentro de este martes. Aún así, el LAFC tuvo un par de oportunidades claras, aprovechando los titubeos de la zaga esmeralda. Cierto es que aún no está nada definido y que en la vuelta las cosas pueden cambiar en favor de los californianos, pero en lo general, el León sigue pareciendo un mejor conjunto, que si se aplica, no debería tener problema para definir la serie.

4.- La definición de Jean Meneses en la primera anotación es lo mejor del encuentro. Por otro lado, Luis Montes, que tampoco tuvo una buena actuación durante casi todo el partido logró salvar su gris desempeño con una genialidad en el segundo gol, poniendo un pase preciso a Ángel Mena, quien también se lleva los aplausos por su buena definición.

5.- El León jugó sin delantero todo el partido, y a pesar de ello, consiguió dos anotaciones. Y sí -lo dije bien-, sin delantero, porque Ismael Sosa no lo es, y porque Leo Ramos -que entra en la segunda mitad- sigue sin marcar diferencia. Meneses, y sobre todo Mena, han tomado el papel goleador de la escuadra leonesa, pero no contar con un “matón” en el área, preocupa.

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