Por Luis Miguel Guerrero

1.- Va la pregunta del millón: ¿Si tienes a la mejor zaga del torneo, con solo 14 goles en contra, para que la cambias en tu primer juego de liguilla? Cada cabeza es un mundo, y el técnico Ambriz consideró que era oportuno colocar a Mosquera como titular. ¿El resultado? León perdía 2-0 al minuto 36 con todo y autogol de Mosquera, y con un Barreiro tibio sin el respaldo -como toda la temporada- de Tesillo, quien apareció como lateral. El cuadro bajo leonés tiene que “ponerse las pilas” en el juego de vuelta, porque los poblanos ya se dieron cuenta con rápidos contragolpes pueden hacer mucho daño.

2.- La desesperación mostrada por varios jugadores leoneses tras el trancazo inicial, y la inseguridad frente al marco contrario evidenciada en varias jugadas, dejan una sensación de duda y hace reaparecer el fantasma de la eliminación ante Morelia hace un año. Mucho se tendrá que trabajar en el aspecto anímico y mental de cara al próximo sábado, porque los problemas del cuadro esmeralda podrían estar ahí.

3.- Se ha criticado a Pedro Aquino por su falta de concentración en cada una de sus expulsiones, pero ante Puebla, Mena  regaló una amarilla absurda y Tesillo se salvó de una expulsión. Como ya se dijo, se requiere concentración en esta fase el torneo, y más aún ante un rival crecido, que suple sus carencias con una gran motivación y que llegará a la vuelta con el marcador global a su favor.

4.- Fernando Navarro errático; Luis Montes intermitente; Jean Meneses inseguro; y Joel Campbell sin marcar diferencia como relevo. Así las cosas, se necesita que estos cuatro ofrezcan algo distinto en el regreso, porque todo el futbol leonés al ataque pasa por ellos. Mucho dependerá el resultado del sábado de lo enfocada que esta cuarteta salte al campo.

5.- El arquero Nicolás Vikonis marcó diferencia, salvando a su equipo de varias llegadas leonesas. El uruguayo, que es una garantía bajo los tres palos, es un auténtico “costal de mañas” y puede ser pieza clave en el partido del sábado. La imprudencia de Mena al provocarlo solo sirvió para hacerlo crecer, y el buen momento del cancerbero se puede extender al juego de vuelta. 

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