(14 de septiembre) En un día como hoy pero de 1930, los Leones de Detroit (bajo el nombre de Espartanos de Portsmouth) juegan su primer partido en la NFL (Portsmouth 13-6 Newark).
Los Espartanos, fundados en 1929, jugaron en Portsmouth hasta 1934, cuando castigados por la depresión económica y las pobres entradas, fueron adquiridos en 7,952 dólares por un grupo de empresarios de Detroit. Una vez comprado, el equipo fue rebautizado como Detroit Lions.
Fin de semana de partidos de comodines de la NFL, y aquí presento un breve análisis de cada uno.
Raiders vs Texans
Desafortunadamente para los seguidores de Raiders -que estábamos esperanzados en la gran temporada del equipo- este partido tiene un claro favorito. Y no es debido a la buena defensa de Houston encabezada por Jadeveon Clowney; ni porque Brock Osweiler será el QB titular de Texans; lo es porque Connor Cook, un novato que no solo tendrá su primer partido de playoffs, sino también su primer partido como titular en la NFL, estará al mando de los controles de la ofensiva de Oakland. Las esperanzas de los Raiders se rompieron junto con el peroné de su mariscal titular, Derek Carr.
Favorito: Houston, -4
Lions vs Seahawks
Plagado de lesiones, Seattle llega a esta instancia como un equipo no tan sólido (Kam Chancellor, Earl Thomas, y Tyler Lockett son fundamentales y están en el “hule”). A pesar de eso, la figura de Matt Stafford parece insuficiente para conducir al triunfo a unos Lions que tienen problemas para correr con el ovoide. Russell Wilson, Jimmy Graham, Doug Baldwin y el ruidoso “Jugador número 12”, tienen todo para explotar y hacer pedazos a la defensiva de Detroit.
Favorito: Seattle, -8
Dolphins vs Steelers
La lesión de Ryan Tannehill le quitó posibilidades a Miami. Sin embargo, los Dolphins tienen a su favor dos pequeños puntos: Matt Moore es uno de los mejores mariscales de reserva en la liga; y Miami derrotó a los Steelers en temporada regular (30-15, el 16 de octubre). Pero la cosa es complicada para la escuadra de Adam Gase: ya de por sí, tener a Le’Veon Bell y a Antonio Brown enfrente es aterrador para cualquier defensiva, agregar el nombre de Ben Rothlisberger y sus impresionantes números en el Heinz Field, termina por inclinar la balanza en favor de los Acereros.
Favorito: Pittsburgh, -10
Giants vs Packers
Eli Manning tiene buenos recuerdos ante los Packers las dos veces que ha ganado el Súper Bowl (en ambas los derrotó para poder llegar). Pero en esta ocasión, tendrá enfrente a un equipo embalado, con 6 triunfos al hilo y con un Aaron Rodgers en “versión playoffs”, acompañado de dos buenos receptores: Jordy Nelson y Davante Adams. El equipo de Mike McCarthy llega a la postemporada en su mejor momento, y luce complicado que Nueva York, a pesar de que pueda dar un partido parejo, se salga con la suya de Lambeau Field.
Favorito: Green Bay, -4
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Por Luis Miguel Guerrero
La tradición de que estas dos franquicias de la NFL jueguen en el último jueves de Noviembre (Thanksgiving Day) de cada año, se remonta a 1934, cuando George Richards, dueño de los Leones de Detroit, decidió que su equipo jugaría en el Día de Acción de Gracias contra los Osos de Chicago.
Aprovechando que era el único evento deportivo de ese día, el partido fue transmitido en cadena por 94 estaciones de radio en toda la Unión Americana. Dado el interés que generó, el equipo de la “Ciudad Motor” volvió a jugar en esa misma fecha el siguiente año, iniciándose así la tradición.
Desde entonces, los Leones han jugado en ese día cada año -con excepción del período de 1939 a 1944, por la Segunda Guerra Mundial-, siendo sus partidos televisados desde 1962. En 1966, la NFL decidió que los Vaqueros de Dallas -uno de los equipos más populares entonces y ahora- jugarían un partido anual también en la misma fecha, sumándose la escuadra texana a la tradición iniciada por Detroit.
Otros equipos, como Kansas City, han intentado sumarse a esta costumbre sin tanto éxito. Desde el 2006, la NFL celebra un tercer partido -generalmente nocturno- con distintos equipos cada año.
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Luis Miguel Guerrero 